¡Charlie en adopción!

Este grandullón blanco y negro es tan tranquilo y bueno como hermoso. Unos voluntarios se encontraban en pleno momento de captura de gatos que había que llevar al veterinario, gatos de una colonia.

Por azares del destino, Charlie, junto a su amiguita Naya (que también tenemos con nosotros) se metieron en la jaula. ¿Sería el destino?

Esta colonia se situaba cerca de unos huertos, y cuando les preguntaron a los dueños de estos lugares por ellos, porque los voluntarios no los reconocían de la zona, estos dijeron que no los conocían de nada, que se acercaban a comer desde hacía un tiempo.

A diferencia de los gatos que rondaban esa zona, Charlie y Naya se dejaban acariciar; pues los otros eran muy salvajes. Todo esto provocó algunos problemas entre ellos y la colonia, porque cuando un gato es abandonado en estos lugares por personas que creen que estarán bien porque hay más animales de su especie, no son conscientes de lo que hacen. Los gatos de ese lugar no los aceptaban, por lo que se enfrentaban a ellos para evitar que pudieran comer.

No tenían marca en ninguna de su orejas, motivo extra para saber que no pertenecían a ninguna otra colonia de los alrededores, y confirmar que habían sido dejados allí a su suerte.

Tras esterilizarlos, en sus días de recuperación nos dimos cuenta de que eran gatos muy acostumbrados a las manos, a los humanos, y que buscaban las caricias y el juego; otro motivo más a la lista de confirmación de que habían sido abandonados...

Ahora están junto al resto de gatos del local que tenemos, donde tienen sus juergas, sus ratitos de sol en las ventanas protegidas y su dosis de latita diaria. Pero, claro, eso no es un hogar definitivo, ¿verdad? Estamos seguros de que en algún momento aparecerá alguien para adoptar a esta preciosidad.

Es cierto que a Charlie le cuesta más acercarse a nosotros, y requiere de algo de paciencia de cara a quien quiera ayudarnos a darle una oportunidad. Pero poco a poco nos va cogiendo confianza, lo que hace que sepamos que será un gatito ideal (tanto solo como acompañado, pues se lleva bien con todos sus compis).

Si crees que podrías darle esa oportunidad que no sabemos hacia dónde podría llevarte junto a él..., ¡contáctanos!